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In extrema res o cómo empezar a contar una historia por el final
Por César Sánchez Ruiz
La técnica narrativa denominada in extrema res (expresión latina que significa «en el extremo del asunto») consiste en empezar una narración por el final de la historia o por un punto cercano al final en vez de por su inicio, esto es, mostrando a los personajes en el tramo final de su lucha o en la situación a la que han llegado tras la experiencia vivida.
En la figura, la flecha blanca indica un posible punto de la historia por el que comenzar la narración in extrema res.
Un ejemplo de uso de esta técnica lo tenemos en el relato La sombra sobre Innsmouth, de H. P. Lovecraft, que comienza explicando cómo el protagonista alertó de lo que había descubierto en el pueblo de Innsmouth y cómo las autoridades federales procedieron a tomar el lugar y a bombardear con cargas de profundidad los arrecifes cercanos.
LA SOMBRA SOBRE INNSMOUTH
1.
Durante el invierno de 1927-28, los agentes del Gobierno Federal realizaron una extraña y secreta investigación sobre ciertas instalaciones del antiguo puerto marítimo de Innsmouth, en Massachusetts. (...) Fui yo quien, a primera hora de la mañana del 16 de julio de 1927, huyó frenéticamente de Innsmouth, y quien suplicó horrorizado al Gobierno que abriese una investigación y actuase en consecuencia.
Tras esta introducción, el relato de los hechos retrocede al inicio de la historia para explicar cómo el protagonista había llegado a Innsmouth unos meses antes y lo que, para su horror, descubrió allí.
Nunca había oído hablar de Innsmouth hasta la víspera del día en que lo vi por primera y —hasta ahora— última vez. Celebraba mi mayoría de edad dando la vuelta a Nueva Inglaterra —turismo, antigüedades, interés genealógico— y había planeado ir directamente desde el antiguo pueblo de Newburyport a Arkham, de donde provenía la familia de mi padre.
El uso de la técnica in extrema res nos servirá para dejar intrigado al lector: una vez le hayamos mostrado en qué situación han acabado los personajes, querrá saber cómo llegaron a ella y conocer la respuesta a cualquier pregunta que este atisbo del final de la historia haya planteado. Esto le obligará a seguir leyendo.
Así, en La sombra sobre Innsmouth, tras leer el inicio del relato, el lector querrá saber qué le ocurrió exactamente al protagonista y qué horror se ocultaba en el pueblo y los arrecifes cercanos. Si no sigue leyendo, pues no lo sabrá.
Podemos, hábilmente, no adelantarle al lector todo el final de la historia, sino reservarnos cierta información importante que sólo le comunicaremos al término de la narración. Así, el cierre del texto le satisfará del todo.
En La sombra sobre Innsmouth, una vez las autoridades han tomado cartas en el asunto, el protagonista aún sigue realizando pesquisas sobre la gente que habitaba Innsmouth, lo que le lleva a obtener un aterrador último dato.
Empezar una narración mostrando un momento del final de la historia también sirve para, por ejemplo, comunicar el tono de la historia en los casos en el que el inicio de esta no permita comunicarlo y, en cambio, nos interese hacerlo lo antes posible en la narración.
Lee sobre la técnica alternativa: in medias res.
Fragmentos de La sombra sobre Innsmouth tomados de Los mitos de Cthulhu, varios autores, Alianza Editorial, 1980.